lunes, 29 de octubre de 2012


Monsanto suspendió en Brasil el cobro de regalías por soja tolerante a glifosato

Monsanto anunció que suspenderá en todo el territorio brasileño el cobro de regalías por la patente del gen de tolerancia al glifosato luego de que la semana pasada un juez del estado de Mato Grosso determinara que dicha patente había expirado en 2010.
Por medio de un comunicado difundido hoy miércoles, la filial brasileña de Monsanto indicó que “por respeto a los productores de soja de todo el país” decidió extender la orden judicial, vigente sólo en Mato Grosso, a todo el territorio nacional.
Sin embargo, la compañía aclaró que buscará revertir la medida determinada por el juez Elinaldo Veloso Gomes, titular de la 4ª Câmara Cível do Tribunal de Justiça de Mato Grosso, a partir de una solicitud realizada por la Federação da Agricultura e Pecuária do Estado de Mato Grosso (Famato) y que contó con el apoyo de la Associação dos Produtores de Soja e Milho de Mato Grosso (Aprosoja MT).
En Brasil rige –o regía– un sistema por medio del cual los productores agrícolas pueden pagar regalías al momento de comprar la semilla de soja tolerante a glifosato o bien pagar dicha regalía al momento de comercializar el grano. En este último caso, deben pagar un 2,0 por ciento de la facturación generada por las partidas de soja declaradas. Pero si un productor no declara que está comercializando soja tolerante a glifosato y se detecta la presencia del evento biotecnológico en una partida, entonces la tasa por pagar es del 3,0 por ciento más el costo del análisis de detección de material transgénico.
Elinaldo Veloso Gomes consideró que la patente de Monsanto de la soja tolerante a glifosato “venció en agosto de 2010” y que, por lo tanto, la cobranza de regalías correspondiente a ese evento es “flagrantemente ilegal”.
En EE.UU. Monsanto obtuvo la patente del gen de tolerancia a glifosato (“glyphosate-resistant plants”) en julio de 2010 y luego la “revalidó” en 2014. Por tal motivo, la filial brasileña de la compañía estadounidense indicó que apelará la medida judicial al entender que la patente del gen de tolerancia a glifosato vence en 2014 (recordemos que las patentes tienen una vigencia de 20 años y que, una vez vencidas, dejan de estar protegidas para pasar a ser “genéricos” de uso público).

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