El clima y los cultivos: Eduardo Sierra

El frente pampero llegó con todo en el comienzo del fin de semana largo. Es parte de la inauguración de la temporada fuerte de lluvias que enfatizará los problemas en las zonas anegadas como Buenos Aires y reparará la falta de humedad en otras -como el NOA- que hace dos años transitan un período seco. Aparentemente, el punto medio no es habilidad de este episodio de El Niño.

Según indicó el especialista en agroclimatología, Eduardo Sierra, sobre Buenos Aires “está actuando lo que se denomina subsinóptico: un sistema de lluvias que se autoalimenta.  Esto es lo que ocurre, da la impresión que se entró en este ciclo de inundaciones que afecta a la Cuenca del Salado que tiene muchas zonas en las cuales el escurrimiento hacia el mar no funciona por la falta de pendiente. Comprobamos así que los canales no son efectivos, en su momento se invirtió mucho dinero en este tema pero la solución que dan los ingenieros hidráulicos es otra”.

Si este esquema se mantiene, la situación de Buenos Aires se puede agravar aún más, “no sólo en esta campaña sino por dos o tres años más”, indicó el especialista.

En contraposición,  el norte del país comienza a recibir lluvias ahora: Chaco, NOA y Norte de Mesopotamia. “Venimos de dos años secos, el contenido de humedad es muy inferior a lo normal. Es normal que estas zonas reciban el agua a partir de octubre. Este pasaje frontal que tenemos ahora, lanzó un alerta: se esperan tormentas fuertes sobre Corrientes, Misiones, Chaco y Paraguay. La estación de lluvias empieza ahora en esas zonas (para el girasol llegó tarde pero a partir de ahora el norte tendrá buena humedad para restablecer los suelos)”.

Según describió Sierra,  en este episodio hay tormentas fuertes y también la zona norte puede verse que tiene cuencas y llanuras puede verse afectada por inundaciones: “esas cuencas se inundan cuando el Paraná está alto y empieza a crecer en la temporada de lluvias”.

La temporada de lluvias se extendería desde octubre hasta diciembre. “Enero y febrero serán tranquilos, comentó Sierra, aunque  se ve que marzo será un mes de lluvias verdaderamente inundantes.  Al país le traerá una cosecha récord (eso no está en riesgo porque el área agrícola anegada es poca), pero localmente Buenos Aires estará en riesgo durante este año porque las lluvias exceden los valores pronosticados.”, concluyó

Fuente: La hora del campo
Radio Continental Alejandro Cánepa